"La calidad de vida de los perros de protectora, refugios o perreras es mejorable si bajamos su nivel de estrés, enriquecemos el ambiente y les proporcionamos contacto social. Los grandes males en las protectoras son: el estrés, el aburrimiento y la soledad. Si solucionamos esto o mejoramos estos aspectos veremos que la mayoría de problemas de comportamiento desaparecen o por lo menos mejoran.
En este artículo, que estoy intentando trabajar a fondo porque sé que con esto podría ayudar a muchos perros, vamos a hablar de cómo reducir el estrés, como enriquecer el ambiente un poquito y como cubrir una parte de las necesidades afectivas de estos perros.
Creo importante deciros que esto es sólo un punto de vista, son mis conocimientos, las cosas que me funcionan y la experiencia que tengo en el mundo de las protectoras, que no es mucha tampoco. He estado 4 años de voluntaria en protectora y poco más de un año haciendo terapias con perros de protectora y formándome en este sector. Dicho esto, seguro que hay otras opiniones y formas de ver de diferentes profesionales, seguro que con más experiencia y otros conocimientos y los invito a compartir ideas por el bien de los perros a los que peor les ha tocado vivir.
Agradeceré todo tipo de comentarios, buenos y malos y toda la información que podáis enviar que sea de ayuda para ampliar y mejorar este escrito.
1. QUE ES EL ESTRÉS?
Cuando hablas de estrés en perros la gente, tanto propietarios como trabajadores y voluntarios de protectoras, es reacia a creerlo. Los comentarios son: "como va a tener estrés un perro?" "jajajaja como las personas???""Si será que el perro tiene muchas responsabilidades y obligaciones como para estresarse"…
El estrés es algo natural y necesario tanto en la vida de los perros como en la nuestra. Es una respuesta fisiológica ante una exigencia o cambio del ambiente. Se podría definir como un mecanismo que activa al perro a adaptarse a algo nuevo o a buscar solución a una situación que se le presenta como un problema o una novedad. Ante una situación nueva, el perro reacciona, luego intenta adaptarse o buscar una solución y si no lo consigue entra en una fase de agotamiento.
Los perros que se adaptan y encuentran la solución no tendrán problemas, estrés hay en el día a día y es algo normal. Pero cuando esta situación estresante aparece con demasiada frecuencia, o están demasiado tiempo sometidos a ella o cuando están en un sitio donde no puedes solucionar el problema de ninguna manera, el perro se agota y es cuando vienen los problemas por estrés o ansiedad.
En las protectoras se dan muchas de estas situaciones estresantes, se producen muy a menudo, durante demasiado tiempo y el perro no tiene posibilidad de encontrar solución o mejorar la situación.
En primer lugar, cuando un perro llega a la protectora, en el mejor de los casos lo deja una familia o persona, y esto ya conlleva sentimientos de perdida, soledad, frustración, preocupación, tristeza... mas un cambio de ambiente a peor y estar con personas desconocidas. En el peor de los casos lo han dejado tirado en la calle, han visto como sus familias lo abandonaban, seguramente los siguió hasta que no pudo mas o hasta que lo atropellaron, tuvo muchos sustos, pasó miedo, frio, hambre, algunos dolor por las heridas y golpes... luego personas que no conocen, patadas de quien no se fía de él y no lo quieren cerca, gente que lo quiere coger, que le tiran un lazo y lo obligan a entrar a un sitio pequeño, oscuro y con ruidos... llega muerto de miedo a la protectora, un sitio nuevo, con mucho ruido, muchos ladridos, no sabe porque hay tantos perros, si le quieren hacer daño, si está seguro en esa situación.... UN PERRO NO PUEDE TENER ESTRES??? A las personas nos estresa el no saber seguro si vamos a perder un trabajo, un perro que se queda sin nada y lo obligan a malvivir entre rejas no va a estar estresado??? Una persona en esa situación ya estaría en estado de shock y al poco tiempo con depresión profunda.... Ellos son increíblemente mas resistentes emocionalmente que nosotros pero no olvidemos el sufrimiento y la angustia que llevan a sus espaldas.
Bajar el nivel de estrés en la protectora no es nada fácil, y menos aun cuando la dirección del centro pone mil trabas sin fundamentos. Os daré ideas sobre qué hacer y cada uno que haga lo que pueda, cada uno conoce la realidad de la protectora, refugio o perrera en la que colabora y lo más seguro es que hayan muchas cosas imposibles de hacer, pero es bueno que se sepan y que si conseguís aplicar alguna, los perros serán un poquito más felices.
2. PORQUE HAY ESTRÉS EN LAS PROTECTORAS? QUE LO PRODUCE?
Lo producen un sinfín de situaciones, manipulaciones, actividades y actitudes. Las más importantes:
- Solo el no tener las necesidades básicas cubiertas creo que ya estresa.
- La falta de contacto social y la soledad.
- El no tener juguetes ni nada para entretenerse y desahogarse.
- Estar siempre en los mismos sitios, sin olores nuevos y sin nada interesante que hacer.
- Estar en sitios excesivamente fríos o calurosos.
- Otro problema es que visualmente se estimulan mucho y se ponen nerviosos porque quieren acceder a lo que ven y no pueden, les genera frustración, y la frustración genera estrés, es muy importante que sepamos que les sometemos a muchísimos estímulos importantes para ellos y que no les permitimos que los exploren porque están encerrados.
- Los contactos con las personas que entran a su jaula, lejos de ser tranquilos y calmados, son todo lo contrario, bienvenidas efusivas con mucho nerviosismo que zanjamos de golpe al irnos dejando al perro sobreexcitado sin posibilidad de que se pueda relajar con ninguna conducta correcta.
- Salidas y paseos insuficientes.
- Demasiada excitación y prisas en el momento del paseo.
- Pasamos delante de la vista de los perros a menudo con otros perros o hacemos cosas estimulantes delante de ellos.
- Manipulados inadecuados, obligarlos a entrar en los sitios tirando de ellos del collar, abrazos, etc.
- Correcciones, regañinas, tirones de correa...
- Lo más importante: Las prisas, cuando entramos en la protectora empezamos a correr, vamos a contrarreloj para que nos de tiempo a hacerlo todo y a pasear a los máximos posibles.... con esto ellos tienen la sensación de que va a pasar algo, los angustiamos y los ponemos nerviosos. Esto se produce porque tristemente siempre hay un excesivo número de perros para la gente que va a cuidarlos.
- No olvidemos tampoco que no tienen a disposición lugares adecuados para mantener una correcta conducta higiénica.
- Los pocos patios de recreo que suelen haber tienen un campo visual abierto a otros perros que están en otras jaulas, estimulación a la que no pueden acceder.
- Las jaulas y los patios se comunican por rejas que permiten el contacto visual incluso físico entre barrotes. Los perros se alteran con esto, a parte de querer acceder a lo del otro patio y no poder, se ladran con otros perros con los que no se llevan bien y se activan. En ocasiones incluso se enganchan y se hacen daño físico. Esto genera mucho estrés.
- El pavimento de estos patios no siempre es el adecuado.
- Muchas veces la limpieza de la jaula es incorrecta.
Más todo lo que llevan a las espaldas desde su entrada al centro:
- Un cambio brusco de “hogar”
- Desaparición de todo lo que es suyo y lo que ellos conocen, no tienen la seguridad del hogar.
- Desaparición de las personas a las que quieren y de sus referentes de seguridad.
- Desaparición de otros perros o gatos con los que posiblemente conviviera, de sus amigos del parque y de su barrio…
- Desaparición de sus rutinas y de su día a día.
3. COMO MEJORAR SU CALIDAD DE VIDA?
Para mejorar la calidad de vida de los perritos de protectora y permitirles vivir más tranquilos y a gusto dentro de las circunstancias en las que les ha tocado vivir, reduciremos en la medida de lo posible las situaciones de estrés, mejoraremos su sentimiento de soledad y les permitiremos estimulación mental y enriquecimiento ambiental.
3.1. Reducción de estrés.
Algo que todo voluntario puede hacer es estar en calma y ser natural, transmitir tranquilidad y moverse a poco a poco, sin prisas. Dejar los problemas fuera, relajarse mientras se está con ellos, eliminar discusiones y malos rollos con otras personas. Manipularlos correctamente con respeto y sin prisas, pedirles las cosas con paciencia y premiando con comida (en las protectoras que se pueda, me parece el colmo no poder dar comida en protectoras), nada de correcciones ni castigos ni gritos. Hacer la limpieza de las jaulas sin ellos dentro. Las fregonas, escobas…pueden asustar a los perros y la utilización de lejías y demás productos no puede ser algo agradable para ellos.
Intentar no manipular o jugar con perros delante de otros que están encerrados en sus jaulas. Recomiendo poner paneles o plásticos, barreras visuales en la vallas o rejas con el fin de proteger a los perros de tanta estimulación visual a la que no pueden acceder. Sobre todo por los sitios donde los perros salen de paseo o el patio de recreo. Que los perros no vean quien sale y quien entra de paseo ni a los patios. Y poner barreras visuales entre perros que están al lado de otros con los que no se llevan bien y se ladran y gruñen todo el día. Aunque sepan que el otro está ahí detrás, si no se ven no se activan y baja su nivel de estrés.
Estar atentos a sus señales, cuando veamos que algo les agobia o les pone nerviosos y tensos, dejar de hacerlo.
Proporcionarles camitas y mantas que los aíslen del frio en invierno y, en verano, aseguraros de que tienen un mínimo de sombra en el que resguardarse del calor. Proporcionarles juguetes para que se puedan entretener. Suele pasar que al no tener nada que hacer el perro se entretenga rompiendo su manta o camita, que es lo único que hay y como la rompe ya no le ponen más y tienen que pasar frio por las noches.
Dedicarles un ratito de tranquilidad y atención para que no tengan que desesperarse para conseguirla. Y hacerlo en el momento adecuado. Entremos en la jaula solo diciendo "hola" con voz tranquila, y hacernos los ocupados moviéndonos tranquilamente, acariciar y dar afecto cuando el perro está relativamente tranquilo.
El pavimento de los patios debería ser de tierra o de césped. Y deberían tener posibilidad de salir a ellos o a pasear varias veces al día para poder hacer los pipis y las cacas en un sitio adecuado y no tener que hacerlo en el sitio donde duermen y comen, esto les permitiría mantener una correcta conducta higiénica.
Por otro lado, procuremos que los baños y la peluquería, si los hay, los hagan profesionales y gente respetuosa y con conocimientos sobre educación canina. Los manipulados incorrectos generan muchísimo estrés.
3.2. Para mejorar el sentimiento de soledad y la necesidad de contacto social.
Los perros son animales muy sociales. A menudo, en los refugios vemos perros que llevan años solos. Lo primero que deberíamos intentar es ponerle un compañero de jaula adecuado.
Cuando un perro entra en el refugio viene con una punta de estrés, tal y como hemos comentado antes y es normal que en esta situación estén reactivos y a la defensiva (todo les altera, les preocupa y suelen tener miedo a cosas que normalmente no se lo tendrían) en este momento es cuando en las protectoras se mira si el perro es sociable con otros perros o no y si se ve el más mínimo gruñido o comportamiento defensivo se condena al perro a un aislamiento permanente para todos los años que el perro este en la protectora.
Pasado el período de adaptación al triste y estresante ambiente en el que le ha tocado estar (2 ó 3 semanas), el perro se acostumbra o se resigna a su nuevo "hogar" y entonces se tranquiliza. Es aquí cuando debemos intentar por todos los medios que el perro tenga por lo menos un compañero de jaula y que este sea más o menos estable.
Como hacerlo:
Primero de todo, conocer a los perros para pensar en cómo emparejarlos de la mejor forma. A un perro nervioso deberíamos ponerle un compañero tranquilo. Evitaría poner perros con problemas de conducta similares juntos. A un perro miedoso lo pondría con un perro sociable y seguro de sí mismo. Si hay un perro reactivo con otros perros (ladra como un loco cuando pasa otro perro por delante) no ponerle a otro perro que haga lo mismo, ponerle un perro sociable que por un lado intentará tranquilizarlo y calmar la situación, quizá pueda aprender la buena conducta del otro, pero podemos evitar enfrentamientos entre estos mismos perros ya que aunque los ladridos y gruñidos vayan hacia el de fuera, en un pico de estrés pueden llegar a marcarse entre ellos. Los machos "peleones" suelen aceptar mejor tener compañeras hembras, preferentemente tranquilas. Algo muy importante, no poner perros inseguros y miedosos juntos. Mucho cuidado con esto, son perros que con nosotros son muy buenos y cariñosos, a lo mejor algo miedosos, parece que no serian capaces de hacer nada a nadie. Hace años que veo que los perros miedosos e inseguros, en un sitio estresante, atacan a otros perros con el mismo problema que ellos. Estos perros ante otros perros sin miedos, más estables y tranquilos no reaccionan o simplemente se esconden. Pero a menudo, si dos perros inseguros se juntan se ladran y pueden acabar marcándose. No se seguro porque lo hacen pero creo que es su lenguaje corporal lo que activa al otro. Ninguno de los dos se fía del otro porque ninguno está tranquilo y ninguno confía en que la situación vaya a ir bien. Cuidado con esto. Valorar el carácter, el nivel de estrés, la edad, los problemas de comportamiento y emparejarlos de la mejor forma posible. Si un perro está muy estresado primero bajémosle el estrés antes de intentar que se lleve bien con otros.
Para hacer las presentaciones, que una persona coja a uno de los perros y lo pasee, un paseo largo, relajado, tranquilo y con ejercicios de relajación (olisqueo, luego diré como hacerlo) y sobre todo con correa larga. Al otro perro que lo saque otra persona y haga lo mismo por otro lado. Después, juntar los paseos de los dos perros, caminar por el mismo camino uno a cada lado, en este momento acortar un poco la correa pero sin tirones ni tensiones. Como si nada, dejar que se vayan viendo e ir premiando con comida a cada uno de los perros si el perro esta tranquilo, ir juntando más a los perros hasta que acaben paseando juntos. Observar bien las reacciones de los perros, estar muy pendientes por si hay comportamientos tensos (erizamientos, cola tensa hacia arriba, ...). Vuestra actitud debe ser tranquila y despreocupada, debéis ser un referente de calma y de seguridad para ellos, no hablar (añadiríais tensión o emoción al ambiente) nada de tirones de correa y nada de tensión de correa, dejar los miedos a las peleas para otro día, los perros van atados y al primer gruñido los vais a poder separar, no vale la pena estar nervioso 1º porque estas predisponiendo que la situación salga mal, 2º no tiene sentido tanta preocupación ni miedos porque hay mucho que ganar y muy poco que perder.
Si el paseo ha ido genial, se han olido, han paseado juntos y han estado tranquilos oliendo cosas juntos, o incluso han jugado, perfecto al llegar podemos dejarlos juntos en el mismo sitio, el primer día bajo supervisión, quedémonos un ratito con ellos para asegurar que todo va bien. Si en alguno de los dos hemos visto algo de tensión no los pongamos juntos de momento. Paseemos a los perros juntos varias veces hasta que se conozcan y lo veamos claro. Ahora que los conoces más y sabes que comportamientos tiene uno y otro piensa en si son perros que pueden llegar a estar juntos o no y si iría mejor ponerlos con otro tipo de perros.
Ponerle un compañero a un perro que lleva años solo supone una gran mejora para el perro y ya puedes estar orgullosa/o de lo que has conseguido por él.
Es muy importante que pueda conocer también otros perros, aunque sea en los paseos. Permitir que se huelan e interaccionen todo lo que os sea posible y estar muy atentos al lenguaje corporal de los perros para evitar peleas. Cuanto más estrés reduzcamos en los perros, menor será el riesgo de conflicto entre ellos.
A parte de las relaciones sociales con los perros, también necesitan relaciones con humanos. Aquí hay demasiados aspectos que hay que tener en cuenta pero destaco lo más importante:
El momento adecuado para recibir atención
Hablando de perros de protectora es más difícil establecer cuando es el momento adecuado para dar afecto y atención a un perro. Creo que es necesario establecer diferencias entre cuando dar afecto en un perro de casa y cuando hacerlo con uno que está en la protectora. Estos animales, tristemente no tienen sus necesidades básicas cubiertas y tienen más necesidad de recibir afecto y de sentir que no están solos en ese mundo horrible en que les ha tocado vivir. Desde luego la solución no es no dar afecto e ignorar al perro hasta que este calmado, es imposible ya que puede estar horas hasta que se calme o incluso que se desespere si pasas de él, algunos están en un estado muy alterado en el que no van a saber calmarse ni van a aprender nada, desde luego la solución tampoco es dar afecto indiscriminadamente potenciando comportamientos histéricos y conductas nerviosas.
Así que más que ignorar comportamientos nerviosos hay que comunicarles que queremos que se tranquilicen. Comunicarnos para hacerles saber que no nos vamos, que no tienen que “luchar” por que nos quedemos, pero que tienen que bajar el nivel de excitación y autoconrolarse. Para acercarse a las jaulas recomiendo utilizar señales de calma, como mínimo acercarse a las jaulas a poco a poco, agacharse al llegar, decirles "hola" de forma relajada y girar un poco la cabeza hacia un lado, quedarse en esta posición hasta que hay un descenso de la actividad y del nerviosismo en el perro, levantarnos despacio y esturreamos un puñado de frankfurts cortaditos pequeños en la jaula antes o justo después de entrar en ella. Mientras el perro o perros buscan los frankfurt, ir tirando mas, veréis que funciona muy bien, se van calmando. Cuando se acaban los Frankfurt vienen a ti suplicando caricias y atención, lo que pasa normalmente es que necesitamos poner el collar y arnés rápido, atarlos y ir a pasear de la forma más rápida para que puedan salir más perros de paseo. Es mejor tomarse tiempo para hacer las cosas bien aunque luego el paseo sea más corto, si lo hacemos bien el paseo será mucho más relajante y gratificante para el perro. A la larga se relajaran antes, bajareis su nivel de estrés y mejorareis la calidad de vida de los perros. Cuando se han comido los franfurts y viene a ti, el perro suplica atención, aquí hay que dejarse llevar, lo ideal sería darle afecto y atención cuando el perro este calmado, estará más calmado por haber estado buscando comida un rato pero depende del perro se puede calmar más o menos rápido. Si no esta calmado girar un poco la cara, observarlo, si no se relaja baja la mirada a poco a poco y gira un poco la cara para el otro lado. Si esta calmado podéis acariciarlo de forma tranquila, luego hablaremos de cómo dar el afecto correctamente. Para perros que están intentando controlarse pero no se acaban de relajar yo lo que hago es agacharme de forma muy lenta y muy relajada, le pongo las manos encima sin moverlas para que sienta el contacto, sepa que no me voy a ir e intento transmitirle mi tranquilidad, pero sigo haciendo señales de calma con la cabeza para decirle que quiero que se relaje, bajo la mirada, giro la cabeza hacia el lado.... Seguramente habrán educadores caninos que no estarán de acuerdo con esto, es prestar atención a un comportamiento nervioso y suplicante, pero a mí me funciona, el notar el contacto y la tranquilidad facilita que el perro se relaje, en cuanto se calma entonces lo acariciamos, contacto suave y caricias largas y tranquilas. Para perros que después de buscar salchichas siguen muy alterados y saltan encima, te ladran pidiendo atención, te cogen los brazos con la boca, me cruzo de brazos y giro la cabeza hacia un lado, permanezco así e intentando pensar en otra cosa, si no funciona me doy la vuelta y sigo inmóvil, cuando se de cuenta de su estado se empezará a autotranquilizarse (a veces tardan en comprenderlo y llegas a casa con rascadas...), cuando el perro se va a oler otras cosas empieza a moverte muy a poco a poco, dando paseos por la jaula mirando hacia afuera, funciona el hacerte el loco manipulando algo que lleves en el bolsillo... cuando este calmado te agachas y lo acaricias de forma suave. Soy partidaria de premiar comportamientos más tranquilos que los anteriores aunque el perro no este relajado del todo. Si ves que se ha tranquilizado más que el día anterior dale la atención. Poner la correa y el salir fuera también debe ser algo relajado. Podéis ir tirando trocitos de Frankfurt después de salir de la jaula y antes de salir a la calle, este momento suele ser uno de los más estresantes para ellos.
Son opiniones, pero para las caricias, el mejor momento para darlas no es ni antes ni durante el paseo, el paseo debe ser relajante y estos perros pasean tan poco que cuando salen ya es algo muy excitante, no debemos añadir más excitación con caricias y palabras que los pasen de vueltas. Cuando llegas del paseo con él y le quitas la correa, ellos beben agua, después de beber se quedan relajados y tranquilos, este es el momento de darle caricias y decirle que es el perrito más bonito del mundo, que se sienta querido. Seguramente es el momento en el que el perro este más tranquilo, por lo tanto hay que aprovechar este momento para premiar con afecto el estado de calma.
Caricias correctas
Los voluntarios, con toda la buena intención del mundo y para compensar de alguna manera a estos perritos que tan mal lo pasan y para darles el máximo afecto, les provocamos más estrés y dependencia hacia nosotros. Estuve 2 años saludando de forma efusiva a los perros al entrar y me despedía de ellos al salir, premiaba actitudes nerviosas con afecto a la llegada, antes de salir de paseo, los acariciaba cuando me saltaban encima.... Ahora ya... no puedo arreglar lo que hice: la excitación que generaba mi llegada y la dependencia que generé en algunos perros. Fue con la mejor intención pero desde el desconocimiento y esto pasa en toooooodas las protectoras. La gente que va lleva la mejor intención pero no significa que sea lo mejor para el bienestar de los perros, hay que cambiar el chip.
Acariciar cuando están en calma (en la medida de lo posible siempre, claro), ignorar conductas nerviosas y miedosas.
Es importante no despedirnos de ellos cuando nos vamos, al despedirnos les generamos una expectativa de contacto con nosotros que frustramos de golpe al irnos. Ellos creen que vamos a estar con ellos un rato cuando nos despedimos y es lo contrario, nos vamos de golpe.
Caricias largas, suaves y tranquilas. A cada perro le gusta que lo acaricien en un sitio diferente, unos te ponen el cuello, otro se ponen panza arriba, otros te ponen el culete... estar atentos a las señales de los perros y acariciarles donde les gusta y les relaja. Normalmente evitar tocar las patas, las orejas, la cola... y sobre todo, nunca nunca nunca forzar a un perro cogiéndolo del collar, menos aun a un perro con estrés. Se dan muchas agresiones por este motivo.
Hablarles de forma tranquila y calmada, nada de : "ay mi niño, cuantos días... pobrecito! Vamos a pasear, corre, vamos". Así los pasamos de vueltas cuando ellos necesitan calma. Cuando los perros se saludan se calman y se aseguran de que todo esta tranquilo y en paz antes de acercarse al otro y olerse. Nosotros cambiamos su naturaleza, lejos de calmarlos al verlos, los activamos con caricias y palabras de alteración. No les hacemos ningún bien.
Tener en cuenta que no a todos los perros les gustan las caricias, simplemente algunos no están acostumbrados a recibirlas, o estuvieron mal socializados y aislados o simplemente no les gusta el contacto físico con personas por alguna mala asociación. Sobretodo con perros con miedos y antecedentes de agresión o perros con mucho estrés no forzar las caricias ni el contacto físico. A veces es mejor estar con ellos sin hacer nada para que sientan que no están solos en el mundo (Un buen consejo de Jaime Vida “Santi”). Es mejor estar con ellos, hacerles señales de calma y acostumbrarlos a tu presencia que forzar la situación. Son ellos los que se acaban acercando y acaban dando el primer paso para recibir caricias.
Algo que baja muchísimo el nivel de estrés en un perro es recibir caricias correctas y tranquilas de una persona por la que siente afecto. Esto es algo que tenemos muy a mano y nadie nos puede prohibir. Aprovechémoslo.
Juegos adecuados
No soy partidaria de jugar mucho con los perros de protectora. En primer lugar, un perro que no tiene las necesidades básicas cubiertas no tiene muchas ganas de jugar. Pero en el caso que las tuviera, no veo conveniente añadir excitación a ese ambiente. Vigilar los juegos porque los perros de protectora el que mas el que menos tiene estrés y no sabemos si ayer tuvo un mal día, si hoy se ha alterado mas porque otro le ha gruñido... y sigue en un estado de alerta. He visto agresiones de perros en protectoras en situaciones de juego, mordiscos en los pies o ataques cuando se coge la pelota que el perro ha dejado caer en el suelo.
No recomiendo jugar mucho a pelota ni a tirar de cuerdas. Y si lo hacemos que el juego este siempre bajo nuestro control y no excitar mucho al perro, y jugar con perros que conozcamos y sepamos cómo van a reaccionar. Podemos jugar con ellos a esconder juguetes y que los busquen, ejercicios de rastreo, ejercicios de obediencia, con juguetes interactivos… Algo muy útil es tirar un puñado de franfurts chiquititos a un sitio con césped, que el perro vea como los esturreamos y pedirle que busque. Esto los relaja y los cansa. Cada vez podemos esturrearlos por sitios más amplios y que tenga que buscar más rato. Si no los encuentra todos y nos mira giramos la cara y le decimos “busca”.
3.3. Estimulación mental y enriquecimiento ambiental
Otro gran problema en los perros de protectora es el aburrimiento y la desidia, para mi es equiparable o peor a la vida de un preso. Es cuestión de empatía y ponernos en su lugar. Que puede hacer un perro entre rejas las 24 horas del día? El que más suerte tiene y en las mejores protectoras sale una 1 vez al día. Pero la realidad es que la mayoría salen 1 ó 2 veces por semana, y muchísimos perros con etiquetas (perros que tiran mucho paseando, perros con miedos, perros que alguna vez agredieron, perros que se pelean con otros perros y son difíciles de controlar) hay perros que llevan años sin salir de su jaula. En que ocupan tantísimas horas del día, puedes dormir o descansar sin subirte por las paredes 12 horas como mucho, pero en que ocupas las otras 12 horas si estas entre rejas, si no tienes juguetes, si el contacto con los cuidadores es mínimo, si no sales de paseo, si te dan de comer de golpe... qué sentido tiene su día a día???
Voy a proponer formas para que los perros estén entretenidos, conozco las problemáticas, las dificultades y las limitaciones en las protectoras. Quizá no se pueda hacer todo, quizá no se pueda hacer nada, pero solo con que se puedan modificar pequeñas cosas y teniendo información para ponernos en el lugar de estos animales, creo que puede marcar una diferencia y que cualquier pequeño cambio que intentemos nosotros puede ser muy significativo para ellos.
Darles de comer
Los perros salvajes dedican la mayoría de las horas del día a buscar comida. Que hacemos nosotros? Le damos de comer a los perros de una tacada y le quitamos el sentido al resto del día. Rita, mi perrita, está acostumbrada a comer su comida en congs (juguetes huecos rellenables). Se tira bastante rato entretenida sacando la comida de dentro. Para que se entretengan más rato le pongo quesitos lights, o comida de perro enlatada...cosas pegajosas para que se enganche el pienso dentro y tarde mas en poder sacarlo. Imaginación al poder! Al principio hay que ponérselo fácil, solo trocitos de pienso que caigan fácil, y luego ir complicándolo un poco... ahora es una autentica experta en sacar la comida de dentro!! Ahora utilizamos juguetes interactivos… cada vez me las tengo que ingeniar más y ella disfruta muuuucho! Pongámosles la comida en juguetes rellenables, o escondamos comida por diferentes sitios de la jaula, la idea es que se esfuercen física o mentalmente para obtener su comida diaria. No lo hagamos con perros que acaban de llegar a la protectora pero si con los que llevan más de un mes. Es darles un reto, una motivación a su día.
En protectora quizás lo más fácil y realista es comprar huesos de tienda para animales, hay de muchas variedades. Recomiendo que sean lo más naturales posibles y que veáis cuales son los que más les gustan y los que más tardan en comerse. Los perros de casa se comen el hueso a ratos, cuando les apetece, pero en las protectoras, como no tienen otra cosa que hacer, están horas hasta que acaban con el hueso, por grandes que sean se lo comen de una sentada. Esto los entretiene y los relaja.
Juegos interactivos.
Esto es poco realista para protectoras, pero quizás se pueda hacer una pequeña inversión y ponerle el juguete cada día a un perro diferente, bajo supervisión. Son juguetes de plástico muy resistente, hay de muchos tipos, pero en todos se esconde comida que el perro va viendo y luego se lo das para que el perro piense en cómo sacar la comida de ahí. Esto los entretiene, los cansa y los estimula mentalmente. Hay que enseñarlos a jugar, no se le pone el juguete y punto. Podéis encontrar muchos en www.kns.com y ahí os explica cómo enseñar a los perros a jugar. Suelen valer unos 30-40€.
Patio de recreo
Estaría genial habilitar un patio "de recreo", donde poner cosas diferentes a las que ven normalmente e interesantes para oler: podéis llevar objetos vuestros, cosas que sepáis que tienen muchos olores, troncos o piedras del campo que tendrán olores nuevos para ellos... Si van saliendo varios perros al patio, se entretendrán oliendo también el rastro de los perros que han pasado anteriormente por ahí. Estaría muy bien que pudieran coincidir con otros perros con los que se lleven bien, podríamos crear grupos de juego con perros que sean compatibles y se lleven bien. Es una forma de facilitarles tener relaciones sociales y entretenerse.
Los paseos.
El momento de la salida de los perros a pasear no debe coincidir con que se dé de comer a los perros que se quedan dentro.
Lo ideal es que los perros salieran como mínimo un par de veces al día, si esto no es posible, estaría bien habilitar el "patio de recreo" que comentamos anteriormente para dejarles salir un ratito cada día. Los paseos son muy importantes para los perros, es el momento de desconexión de la triste realidad en la que viven, aunque se suele pasear por los mismos sitios cada día para ellos es una novedad importante y su mayor distracción, huelen los perros que han pasado antes, caminan, fortalecen la musculatura y se relajan, van contigo o con personas y tienen tu atención... creo que ellos se pasan los días esperando que llegue este momento, es el sentido de sus vidas allí: salir de paseo y conseguir tu atención.
En la medida de lo posible, es muy bueno que los perros de protectora salgan de paseo por pueblos de vez en cuando. Como las protectoras están a las afueras, en el campo, en polígonos.... se acaba paseando a los perros siempre por los mismos sitios, pobres en estímulos y en novedades. Llevarlos al pueblo porque reciben más información , es algo mucho más interesante y sobretodo, va bien para se habitúen a los ruidos, coches, personas, etc. por si salen en adopción. Con perros muy estresados o miedosos no es aconsejable llevarlos a sitios desconocidos o meterlos en el pueblo directamente sin haber hecho un tratamiento previo con ellos.
En los paseos se les debe dejar interactuar con otros perros y personas. Recomiendo jugar con ellos a rastrear o a buscar juguetes con comida que nosotros mismos les escondamos por el camino.
Es importante que en los paseos hayan actividades con gasto físico o mental adecuados a la edad y nivel de actividad que necesita cada perro.
Obediencia.
Hay muchos perros a los que les encanta aprender cositas y ver que se pueden comunicar contigo. Enseñar comandos a los perros de forma positiva, sin castigos ni correcciones y con paciencia es muy bueno para estos perros. En primer lugar es un reto, ellos allí no tienen ninguno y esto les motiva mucho. Segundo, que es un momento en el que se sienten valorados e importantes, son el centro de tu atención y además reciben felicitaciones, premios y caricias por el trabajo bien hecho. Insisto con el tema de la paciencia porque los perros que llevan muchos años en protectora están un poco bloqueados, pero en cuanto aprenden a aprender les encanta! tener en cuenta el estrés, un perro que se acaba de alterar o está muy nervioso no va a poder concentrarse ni aprender, no debemos intentarlo en este momento. Hay que buscar momentos de calma en el perro y un buen entorno relajado y sin otros estímulos ambientales. No hay que perder nunca los nervios, si no entienden lo que les pedimos bajemos el nivel de exigencia y tengamos muchiiiisima paciencia. No bajemos aun más su autoestima. Premiemos muchísimo los pequeños logros, sobre todos los primeros, y nunca acabemos la sesión de adiestramiento cuando el perro no lo ha hecho correctamente. Si le estamos enseñando el tumbado y esta costando, no agobiemos mucho al perro, no insistamos demasiado, y acabemos la sesión pidiendo algo al perro que sabemos que si sabe hacer y prémieselo con afecto y comida. Creo que esto los motiva, les sube su autoestima, aprenden a autocontrolarse, los cansa mentalmente y los relaja.
- Como enseñar a un perro que se siente.
En un sitio tranquilo, coger un premio con los dedos y llamar al perrito. Darle algunos premios solo por hacernos caso. Luego con el premio en los dedos se lo ponemos delante del hocico, y lo llevamos por encima de su hocico y cabeza, guiándolo hacia atrás. A la que se siente decirle: muy bien y le damos el premio. Repetirlo varias veces, 8 ó 10 y seguimos haciendo lo mismo, pero antes de que se siente meteremos el comando y le diremos “sienta”, lo guiamos, le decimos muy bien y le damos el premio. Esto lo hacemos varias veces, también unas 8-10. Lo dejamos descansar un rato. Hacemos un par de repeticiones más y quitamos la comida de la mano. Utilizamos el mismo comando”sienta” y hacemos el mismo gesto, pero sin comida, si se sienta le decimos muy bien y le damos la comida que llevaremos en el pantalón o la dejaremos cerca. Lo repetiremos varias veces e iremos dejando descansar y desconectar al perro si lo vemos agobiado o poco concentrado. Cuando entienda lo que significa el “sienta” quitaremos el gesto y premiaremos cuando se siente solo con decir “sienta”, luego lo felicitamos igual y le daremos el premio.
- Como enseñarle la llamada
Yo aprovecho los paseos para enseñarla, de vez en cuando como saben que llevo comida porque la hago evidente, cuando están tranquilos los llamo “ven” con voz agradable y cariñosa y a la que vienen reciben comida y caricias. Nunca reñirles o enfadarse si no obedecen. Es una forma muy fácil de enseñarles la llamada.
Este escrito no pretende enseñar a adiestrar porque para esto ya hay libros muy buenos, pero son un par de cosas fáciles y muy útiles en el día a día si el perrito encuentra familia.
El adiestramiento en obediencia tiene otra cosa buena y útil, cuando viene un adoptante y le dices que el perro se sienta, se tumba, viene si lo llamas... es un plus importante. Uno de los miedos de los adoptantes es no saber el pasado de los perros, si recibió o no una buena educación y socialización antes de llegar a la protectora.... El que este adiestrado en obediencia da "seguridad" a los adoptantes y creen que el perro será más fácil de controlar. Y a algunos, con que de la patita o haga alguna filigrana ya se enamoran y se lo llevan! Hay gente para todo.... ;)
4. PARA ACABAR
Seguro que me dejo mil cosas importantes, invito a que educadores, adiestradores, voluntarios y gente con experiencia en el mundo canino y en protectoras puntualice, opine, de ideas, hagan observaciones... enviarme todo lo que queráis por mail. Incorporaré todas las ideas útiles que mejoren lo explicado aquí. Creo que se necesitaba un documento como este para ayudar a voluntarios y a los perros de protectora, deberíamos unir conocimientos y esfuerzos por mejorar la calidad de vida de estos animales.
Nuestra sociedad no es responsable ni humana hacia los animales, menos aun con los animales desamparados. Los que amamos a los animales deberíamos unificar esfuerzos para mejorar su bienestar pero sobretodo con los abandonados, que son los que más padecen. He creado esta página: “dreamsdog” con este fin, y este tema que nos ocupa ahora creo que es de vital importancia, que podemos ayudar a muchos perros compartiendo y uniendo conocimientos, ellos no pueden defenderse ni quejarse ni cambiar su situación, hagámoslo por ellos y difundamos esta información.
Finalmente, quiero hacer un comentario que no estaba segura de incorporar, no pretendo aleccionar a nadie ni que nadie se sienta aludido u ofendido. He oído lo mismo en varios profesionales del sector canino y en boca de muchos voluntarios de diferentes protectoras, y lo he vivido durante años pensando que era solo en la protectora donde yo colaboro: Es importante que las personas que trabajan o van como voluntarias a protectoras, canalicen los sentimientos de frustración, desamparo, exceso de trabajo, desgaste físico y psíquico, resentimiento, rabia, sensación de injusticia… estos son los sentimientos negativos que provocan las protectoras. Lo que veo es que estos sentimiento se canalizan a través de disputas y enfrentamientos tontos entre los compañeros y que provocan perdidas de voluntarios y de personal en las instalaciones, perdida de adoptantes, mal ambiente, negatividad, desconfianzas y “malos rollos”.
No perdamos de vista el objetivo que nos une, quien paga por los conflictos entre voluntarios y cuidadores siempre son los mismos? Los perros, que siempre son víctimas indefensas de nuestra sociedad y de nuestro comportamiento. Y nosotros mismos, que nos cargamos de resentimiento, frustración y sentimientos negativos. El ayudar a los perritos debe ser una satisfacción personal, algo positivo!! Cada persona es diferente y piensa de una manera, seamos más tolerantes y comprensivos, hablemos bien las cosas que vayan a ser útiles, aceptemos críticas y opiniones sin verlo como un ataque y callémonos los comentarios despectivos y las críticas no constructivas. Convivamos y cooperemos en harmonía y buen rollo, aprendamos de los demás, compartamos conocimientos y experiencias, seamos comprensivos y aprendamos a perdonar. E ignoremos los comportamientos de las personas poco sociables, que no lo llevan bien o tienen "problemas", no vamos a sacar nada bueno de los enfrentamientos, al revés. No olvidemos nuestro objetivo, por favor. Facilitémonos la vida entre todos y mejoremos la de ellos en la medida que podamos.
Espero que no sienten mal estas últimas palabras. Gracias por dedicar parte de tu tiempo a leer este escrito. Espero que esto te sea de ayuda y a través de tí poder ayudar a muchos perros y mejorar su calidad de vida."
Escrito por: Miriam Olmedillo
adopcionesvallesoriental@hotmail.com
GRACIAS POR TU APORTACIÓN.
Escrito por: Miriam Olmedillo
adopcionesvallesoriental@hotmail.com
GRACIAS POR TU APORTACIÓN.
1 comentario:
Te felicito por tu escrito y por tu intención (mejorar la vida de quienes padecen un castigo que no han merecido)
El gran problema que nos encontramos muchos voluntarios es la masificación de animales, lo que hace que, unido a la falta de voluntarios, la atención debida no sea, ni de lejos, la m8nima adecuada.
Pero suscribo todos y cada uno de los puntos expuestos.
Un abrazo
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